jueves, 12 de enero de 2012

Menudo Curro ( Decimocuarta entrega)

Menudo Curro

- Don Alfredo, quería preguntarle algo.
- Dime Roberto, dime.
- ¿Usted está enfadado conmigo?
- ¿A qué te refieres por enfadado? Debo entender que me lo preguntas en términos generales o por algún motivo concreto.
- Pues no sé. ¿Está enfadado en alguno de los dos?
-Después del tiempo que llevas trabajando conmigo y del trabajo que realizas ¿Tú consideras qué tengo algún motivo?
- Pues la verdad es que no lo sé Don Alfredo, por eso le preguntaba.
- A ver dime a que viene esa pregunta.
- Es por el trabajo que me mandó hacer Don Alfredo, creo que es un castigo.
- Pero si es un trabajo muy sencillo, prácticamente no tienes nada que hacer.
- Pero es que lo paso muy mal Don Alfredo.
- ¿y se puede saber por qué?
- Por que cuando usted me dijo que tenía que hacer de modelo, pensé que se trataba de otra cosa.
- ¿y que fue exactamente lo que pensaste?
- Pensé que se trataba de hacer de modelo de la alta costura, de viajar por todo el mundo participando en desfiles de moda, conocer a los grandes modistos, vestir ropas de marca, acudir a las pasarelas de Madrid, Roma, Milán, Tineo, no sé pensé que se trataba de algo con más glamour.
- La verdad es que conociéndote, no sé como se me ocurrió lo del glamour, en cuanto me pidan alguien para hacer de burbujita de Freixenet te mando el primero.
- Gracias jefe, que ilusión.
-De nada hombre, de nada ya me lo agradecerás cuando seas una estrella del celuloide.
- ¿Del qué?
- Del celuloide.
- ¿Y eso qué es? A mi me suena a papel higiénico.
- Eso es la celulosa, pero déjalo estar, dime entonces, ¿Qué problemas tienes con el trabajo?
- Es que todo el día parado probando ropa para que la modista la arregle es un poco aburrido.
- O sea que el problema es que mientras trabajas, te aburres, pues nada tú no te preocupes que ya se me ocurrirá algo para que hagas a la vez y así aproveches el tiempo, igual te mando hacer collares de fantasía.
-No Don Alfredo, eso no lo puedo hacer.
- No te preocupes que lo de fantasía es solo el nombre, no se trata de que tengas que inventar el diseño.
- No jefe, le digo que no puedo por culpa de la modista, es que no me deja moverme, y por cierto ¿no se le podrían comprar unas gafas?
- Para qué quieres que le compre unas gafas.
- Es que creo que no ve muy bien por que cada poco me pincha con la aguja, y además para mañana le tengo mucho miedo.
- ¿Qué pasa mañana?
- Que me dijo que quería mirar a ver si le daba tiempo a cortarme los bajos.
-Mira debe ser una de las primeras veces que me haces reír.
- Es que si ya es peligrosa con una aguja, no quiero ni pensar en lo que me puede hacer con las tijeras si se le va la mano.
-No te preocupes que no vas a ser en un eunuco.
- Es que no me fio de esa señora.
- Pues puedes fiarte por que como modista es muy buena.
- Jefe en confianza, creo que se equivoca.
- ¿Por qué me dices eso?
- Yo no quiero ser un acusica, pero me parece que le está robando.
- ¿Cómo que me está robando?
- Sí, jefe por que está todo el día que si sisa por aquí que si sisa por allá, y a mi eso me mosquea mucho, pero no se preocupe que la yo la vigilo.
- ¡ah, bueno!, siendo así me quedo mucho más tranquilo.
- Además que como modista tampoco me parece que tenga mucho futuro.
- hombre como tu decías para las pasarelas de Madrid, París, Milán o Roma igual no está, pero a la de Tineo igual llega.
- Pues sinceramente yo creo que no, por que cuando le encargan un traje de hombre todavía pase, pero cuando le encargan un traje de mujer, la cosa no puede salir bien de ningún modo.
- ¿Cómo que no puede salir bien?
- No jefe, por que yo de modelo para hombres vale, pero no creo que sea el modelo más adecuado para mujeres.
- ¿No me digas que también te pone trajes de mujer?
- Pues sí jefe.
- Recuérdame que mañana pase a verte, que eso no me lo quiero perder, debes de estar de foto con los pelos del pecho saliéndote por el escote
- No si a mi eso no me molesta, lo peor es los trajes que son ajustados, por que me mancan un poco en las ingles. No sé jefe, para mi todo esto es un suplicio.
- Aguanta un poco que enseguida te busco otro trabajito.
- Vale Don Alfredo, además tampoco creo que la modista esté con usted mucho tiempo.
- ¿Y eso a que viene?
- Por que no para de decir que tiene que cambiar de patrón que no sabe donde metió el anterior, que tiene dudas de si le va mejor este patrón o tiene que probar con algún otro, y se pasa todo el día así.
- Una pregunta Roberto.
- Diga Don Alfredo.
- Tú de costura no entiendes mucho, ¿Verdad?
- Lo que veo en la tele en los desfiles.
- Ya me doy cuenta ya, anda demuéstrame como desfilas, sal del despacho y déjame seguir trabajando, y para mañana depílate las piernas que voy a ir a verte.
- Vale jefe, ¿La depilación con láser o con cera?
- Que te la hagan brasileña.
- ¿y esa cómo es?
- Vete y que te la expliquen.

Continuará…

1 comentario:

  1. Ay que pobre!!!! Jajajaja, lo del jefe ya es crueldad extrema, mira que mandarle hacer la depilacion brasileña!!! jajaja. Muy bueno!

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