jueves, 16 de febrero de 2012

Menudo Curro (décimo séptima entrega)

- Hola, soy Roberto, me manda Don Alfredo por lo del trabajo.
- Vienes muy temprano.
- Es que no me gusta llegar tarde.
- Que no te parezca mal, pero además me pareces muy poca cosa.
- No se crea yo trabajando me crezco, por eso mi jefe siempre me manda a mi a todos los sitios.
- Bueno, vosotros sabréis, si quieres puedes esperar en ese cuarto mientras vienen los demás, que es ahí donde os vais a cambiar.
- Muy bien, ¿nos avisa usted cuando tengamos que empezar?
- Sí, yo os aviso.
- ¿Y lo de la ropa? No sabía que tenía que cambiarme.
-No claro lo mejor es ir de calle, jajaja, que simpático, la ropa supongo que la traerán tus compañeros que al fin y al cabo vienes a sustituir a uno de ellos.
- Ah, vale si la traen ellos no me preocupo, era por si quería algún tipo de uniforme en particular.
- A mi me da igual, el de bombero, el de policía o mecánico, tu mismo.
- Yo pensaba que me tendría que poner el de camarero.
- Hombre hay gustos de todos los tipos, yo que sé, vosotros mismos. Si eso ya le preguntas a los otros cuando lleguen.
- Yo calculo que un par de horas.
- ¿y entonces por que me mandó a mi venir tan pronto Don Alfredo?
-Y a mí que me cuentas, te dejo que tengo mucho que hacer.
- Hola, ¿Tú eres?
- Roberto, me llamo Roberto.
- Muy bien Roberto así que tú eres nuestro compañero de hoy, el que va a sustituir a Carlos “el trípode” que se puso malo.
- Sí a mi me mandaron a sustituir a alguien, pero no sé como se llama.
- La verdad es que pareces poca cosa, yo esperaba un tío más de gimnasio.
- Sí eso mismo me dijo el del bar, pero ya le dije que yo en el trabajo me crezco, que mi jefe siempre me manda a todos los sitios.
- Ya te puedes crecer ya, que te va a hacer falta para sustituir “al trípode”.
- No os preocupéis que seguro que quedáis encantados conmigo, allí donde voy a trabajar, después siempre llaman a mi jefe para hablarle de mí.
- Me alegra saberlo, por cierto nosotros somos los multiorgasmics boys.
- ¿Sois todos hermanos?
- No, ¿Por qué?
- Como todos tenéis el mismo apellido… multiorgasmics boys.
- ¡Míralo que simpático el chiquitín!, espero que después trabajando seas igual de simpático, toma, aquí tienes la ropa, aunque no sé si te quedará un poco grande
- Si eso la remango.
- Tu mismo, pero que no se note mucho, ¿la ropa interior la traes tú?
- Sí claro, yo nunca voy a trabajar sin ropa interior
- No si al final va a ser todo un profesional.
- Se hace lo que se puede.
- Bueno vamos a ver, te voy a explicar, nosotros salimos primero, tu vienes detrás e imitas los movimientos que nosotros hagamos.
- Vale sin problema.
- Y sobre todo mantén el ritmo con la música que eso a las tías siempre les mola mogollón.
- No si yo solo vengo a trabajar, paso de las tías.
- A si me gusta, un verdadero profesional, pero bueno si hay que calzarse a alguna te la calzas.
- Hombre… si alguna se encapricha… yo tengo mucho sexappeal no os vayáis a pensar.
- Verás el chiquitín como nos sorprende, bueno tú vete preparándote que enseguida nos toca y deben estar todas las mujeres locas.
- Vale, vale, no sabía yo que había que prepararse tanto para sustituir a un recoge vasos.
-Qué simpático.
- Bueno estamos listos, ¿Cómo te encuentras con la ropa?
- Me queda un poco grande pero lo arregle con unos alfileres.
- Muy bien, ahora quédate aquí que vamos a ir saliendo, cuando te toque salir ya te lo dice Armando que es el que se queda aquí en el escenario.
- ¿Vamos a salir por el escenario?
- ¿Por dónde quieres salir si no?
- Yo pensé que salíamos por entre la gente, es mejor para ir cogiendo todo lo que halla por ahí.
- Míralo que salidito. Bueno vamos allá.
- Oiga Armando que esos hombres se estás desnudando.
- Pues claro, y ahora te toca salir a ti, hala cuando quieras.
- Que no, que no, que yo no salgo.
- déjate de miedos escénicos.
- Que no es miedo escénico, que yo vine a recoger vasos.
- Pues sales ahí y recoges sujetadores.
- ¡Que yo no salgo! Deje de empujarme…¡Socorro!
- Menos mal que saliste, pensé que tenía que entrar a buscarte, venga baila.
- Que esto está lleno de mujeres.
- Pues claro que está lleno de mujeres, es comadres.
- Que vergüenza si me ve mi madre.
- Baila y déjate de tonterías, a la de tres arrancamos los pantalones.
-¿queeeeeeee?
- Que te quites los pantalones y muevas el culo.
Que yo no hago eso.
- Mira todas las que son, como suban aquí nos linchan a todos, prepárate, una dos y tres.
- NOOO, yo no, pero que haces no me tires de los pantalones.
- ¡Suéltalos!
- Que no, que yo n o me despeloto
- Déjate de tonterías, anda mira si les gusta, se están riendo además me parece que te animan, no paran de gritar ¡Chiquitín, chiquitín!, Eso va por ti.
- Que no que van a mancillar mi nombre. ¡Ah! Que me dejaste sin pantalón!
- Pero a quien se le ocurre venir con unos gallumbos del pato Donald.
- A mi me gustan mucho.
- No y a ellas que no paran de reírse. No hay quien las entienda, las tienes a todas locas, se fijan más en ti que en nosotras.
- Señoras, por favor miren para otro lado que yo venía a recoger vasos.
- ¡Recógeme a mí que tengo un vaso aquí escondido para ti guapo!
- Señora por favor, un poco de respeto
- ¡Ven aquí, que te voy a hacer mío!
- Señora compórtese.
 - Roberto, que ahora nos toca quitarnos el tanga. ¿Dónde vas? No salgas corriendo, … ¡Por ahí no! ¡Que te estás metiendo en medio de todas las tías!... Bueno chicos nosotros sigamos a lo nuestro, que de este me parece a mí que no vamos a volver a saber nada hasta que acabe la fiesta.

Continuará…

1 comentario:

  1. Ay que me muero!!! jajaja pobre Roberto, ya no le queda nada por hacer.

    ResponderEliminar